Tarija, Bolivia. — Una intensa y prolongada lluvia registrada en la región provocó el colapso de la ruta Camargo–Tarija, dejando el tramo completamente intransitable y generando preocupación en transportistas, comunidades rurales y autoridades locales.
El deslizamiento de lodo, piedras y material rocoso bloqueó varios puntos del camino, obligando al cierre total de la vía mientras maquinaria pesada intenta rehabilitar el acceso.
El Servicio Departamental de Caminos (Sedeca) informó que el temporal superó los niveles habituales de precipitación, saturando el suelo y desencadenando desbordes y deslizamientos repentinos.
Técnicos en la zona advirtieron que existe riesgo de nuevos derrumbes si las lluvias continúan en las próximas horas.
Transportistas expresaron su preocupación debido a que esta ruta constituye un eje fundamental de conexión comercial entre los valles cruceños, Camargo y el departamento de Tarija.
“No hay paso en varios sectores; estamos varados desde la madrugada. El camino está destruido”, reportaron conductores que intentaban llegar a la capital tarijeña.
DESASTRES NATURALES EN OTRAS REGIONES DEL PAÍS
El bloqueo en la ruta Camargo–Tarija se suma a una serie de emergencias climáticas que afectan a diferentes departamentos del país. En las últimas semanas, fuertes lluvias, riadas, inundaciones y desbordes de ríos han puesto en alerta a municipios de Cochabamba, La Paz, Santa Cruz, Potosí y Chuquisaca.
En Cochabamba, comunidades del trópico reportaron pérdidas agrícolas y viviendas afectadas. Tiquipaya soporto riadas de gran magnitud.
En La Paz, las lluvias provocaron deslizamientos en zonas periurbanas y el crecimiento abrupto de ríos.
En Chuquisaca y Potosí, varios caminos secundarios quedaron temporalmente cerrados por derrumbes.
En Santa Cruz, tormentas eléctricas y lluvias intensas generaron anegamientos en áreas rurales.
Autoridades municipales y departamentales coinciden en que el país enfrenta un periodo de alta vulnerabilidad climática, agravado por la falta de infraestructura de contención y la saturación de suelos tras semanas de lluvias.
AUTORIDADES PIDEN COORDINACIÓN NACIONAL
Ante la magnitud de los desastres, diferentes instituciones solicitaron al Gobierno central activar mecanismos de prevención, declarar zonas en emergencia y desplegar apoyo inmediato para rehabilitar las rutas dañadas y asistir a las familias afectadas.
“Los efectos del cambio climático son cada vez más severos. Necesitamos una respuesta rápida, coordinada y permanente para proteger vidas y garantizar la transitabilidad de las carreteras”, señalaron autoridades locales.
Por ahora, la ruta Camargo–Tarija permanece cerrada, y se recomienda a la población evitar viajar hasta que se restablezcan las condiciones de seguridad.



