Domingo, 04 Mayo 2025
0
Compartidos

Dinamita, gas lacrimógeno y tensión: la policía de Bolivia intenta despejar las rutas bloqueadas

Inicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivado
 

En un clima de tensión creciente y cuando surgen nuevas acusaciones contra Evo Morales por supuesto abuso sexual, la policía de Bolivia desplegó cerca de 2.000 efectivos este viernes para despejar las rutas que desde hace 19 días mantienen bloqueadas seguidores del ex presidente para evitar que enfrente una investigación criminal.

En ciertas zonas, los manifestantes resisten con dinamita que lanzan desde los cerros, mientras un grupo de militares denunció que fue "secuestrado" por los defensores del líder indígena.

La policía movilizó tractores para despejar de escombros las rutas, mientras que una fracción de la policía militar apoya las acciones.

Aunque esta vez la policía encontró a su paso un inesperado aliado: el feriado de Todos Santos, una festividad religiosa tradicional en los Andes bolivianos.

Muchos manifestantes se han retirado de las carreteras para la celebrarlo; otros se han concentrado en Parotani, a 347 kilómetros al sudeste de La Paz, una ruta estratégica para la unión de las ciudades del oriente, con el occidente y sur del país, que en los últimos días ha sido el bastión más disputado entre manifestantes y policías.

Hasta allí llegaron varios policías para hacer frente a los manifestantes que, buscando alejar a los agentes, lanzaron dinamita desde los cerros.

La semana pasada cerca de 30 policías resultaron heridos, uno de ellos fue impactado con la explosión de dinamita. Más de medio centenar de manifestantes fueron detenidos, pero los "bloqueadores" volvieron a tomar el control de rutas tras el paso de las fuerzas de seguridad.

La situación más crítica tiene lugar en la región cocalera del Chapare, bastión político y refugio de Morales, donde sus seguidores mantienen rodeados y amenazan con tomar cuarteles policiales y militares, exigiendo el cierre de los casos judiciales contra el ex mandatario.

La paciencia y tolerancia tienen límites, razón por la cual el Estado y el Gobierno se vieron en la obligación constitucional de tomar acciones para garantizar la libre circulación”, dijo el ministro de Defensa, Edmundo Novillo, en la red X.

En tanto, un grupo de soldados denunció este viernes que fueron tomados como "rehenes" por seguidores de Morales dentro de sus instalaciones militares en el Trópico de Cochabamba y le pidieron al gobierno de Luis Arce que no desbloquee las rutas porque sus vidas "corren peligro".

En un video difundido por medios bolivianos, un grupo de soldados parados frente a unas instalaciones militares mandaron un mensaje al gobierno para que "no desbloquee la carretera de Parotani", en la región central de Cochabamba, ya que están rodeados por más de 2.000 'evistas', como se conoce a los sectores leales al expresidente.

"Nos han cortado el agua, luz, nos han tomado como rehenes, pedimos la pronta solución, no intervengan los puntos de bloqueos ya que la vida de mis instructores y soldados (corre peligro), por favor mi general (...) estamos familiares, estamos padres, hijos, hermanos de familias enteras", pidió a Arce un militar, que no se identificó.

Los soldados del Regimiento Militar Cacique Juan Maraza en Villa Tunari en Cochabamba, región que es el bastión político y sindical de Morales, aseguraron que sus "garantías están cortadas".

El conflicto estalló hace tres semanas cuando se conoció una orden de la fiscalía para detener a Morales por el supuesto abuso de una menor de 15 años cuando él aún era mandatario en 2016.

El domingo 27 de octubre, el político de 65 años denunció que su auto fue baleado cuando se dirigía a un programa de radio en esa zona. El ministro de Gobierno Eduardo del Castillo dio otra versión: dijo que Morales se resistió a la requisa de una patrulla antidroga y huyó.

0
Compartidos
Implementado por Marcelo Colpari – BOLIVIA PRENSA