Róger Revuelta, uno de los miembros de la Resistencia Juvenil Cochala (RJC), fue condenado a 12 años de cárcel por el delito de tentativa de asesinato contra el periodista Adair Pinto.
El Tribunal de Sentencia 6º de Cochabamba en audiencia conclusiva de juicio dictó la condena de 12 años y seis meses de cárcel a Revuelta.
El hecho, según Pinto, sucedió en febrero del 2020 en un local de la avenida Libertador Bolívar, cuando Revuelta y un grupo de personas atacaron al periodista.
El periodista Adair Pinto, quien el año 2020, en pleno golpe de Estado, fue agredido por integrantes de la Resistencia Juvenil Cochala (RJC), calificó como “objetiva” la sentencia judicial que sancionó con 12 años y seis meses de cárcel a su agresor, Roger Revuelta, quien hirió con cuchillo al comunicador.
“(Roger Revuelta) quería acabar con mi vida”, dijo Pinto en entrevista con el programa “Contragolpe” de radio Patria Nueva.
El periodista dijo que las autoridades judiciales obraron con objetividad al dictar la sentencia contra Revuelta quien, en febrero del 2020, sacó un arma blanca y asestó tres puñaladas contra el comunicador en el pecho, en el costado izquierdo del tórax y su pierna.
Esa agresión se produjo frente a otras personas que se hallaban en un local público. Previamente, otros integrantes de la RJC agredieron verbalmente y amedrentaron a Pinto, quien se encontraba en un recinto público de la avenida Libertador Bolívar, en la ciudad de Cochabamba.
El periodista, tras agradecer el apoyo de sus abogados, dijo que, con la sentencia, se encuentra justicia frente a ese ataque.
Agregó que la determinación judicial también contribuye a responder a la demanda de memoria, verdad y justicia.
Roger Revuelta, primo de los hermanos Bascopé, colaboradores cercanos de Yassir Molina, líder de la RJC, fue acusado por el delito de tentativa de asesinato y lesiones graves, por el ahora que debe cumplir una condena de 12 años y seis meses, informó radio Kawsachun Coca.
Tanto la RJC como la Unión Juvenil Cruceñista (UJC) actuaron como grupos parapoliciales que consolidaron el golpe de Estado de 2019.
En Santa Cruz, integrantes de la UJC atacaron a indígenas, cercaron y quemaron casas en el barrio Cofadena, en Montero.
En Cochabamba, la Resistencia Juvenil Cochala incurrió en una agresión sin precedentes a la entonces Alcaldesa de Vinto, Patricia Arce, además de agredir a mujeres de pollera que salieron en marcha en defensa de la democracia.