Parlamentarios del Movimiento Al Socialismo (MAS) recibieron con mofa la propuesta del exministro de Gobierno, Arturo Murillo, quien a través de una carta, ofreció ser extraditado a cambio de que a la expresidenta Jeanine Áñez se le otorgue detención domiciliaria, además de la extradición a los Estados Unidos (EEUU) del exjefe antidroga, Maximiliano Dávila.
El diputado Patricio Mendoza (MAS) lo tildó de “loco” por ofrecer una propuesta de esa naturaleza y le recordó que la legislación boliviana no permite un intercambio de "rehenes" porque los delitos son personales.
“Esa figura que está pidiendo el señor Arturo Murillo (sobre un intercambio) (…) no existe en la norma legal de Bolivia. No sé si en otros países existirá, pero me parece que está loco el tipo para pedir ese tema”, expresó Mendoza, en un tono de burla.
El parlamentario consideró que después de mucho tiempo Murillo se victimiza y pretende ayudar a la exmandataria, además lo hace justo en la recta final del proceso de “golpe de Estado II”.
El Tribunal Primero de Sentencia en La Paz decidió postergar el juicio por el caso "Golpe de Estado II", contra la exsenadora y otros jefes policiales y militares, hasta que el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) se pronuncie sobre un recurso de inconstitucionalidad que planteó la defensa legal de la exautoridad, sobre los delitos que la juzgan.
Sobre el tema, el diputado Juan José Jáuregui (MAS) subrayó que Áñez es procesada por los tipos penales de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución Política del Estado. El parlamentario calificó de “cómico” el contenido de la publicación del periodista español sobre Murillo.
“Por favor, todas las aseveraciones que ha señalado en su momento (el periodista Alejandro Entrambasaguas) han tenido la misma consistencia que la que tiene ahora, son absolutamente falsas; en consecuencia, cómo vamos a tomar en cuenta a un individuo que tiene el antecedente de haber emitido una serie de aseveraciones absolutamente desvinculadas”, criticó Jáuregui.
El medio OK Diario de España público una carta enviada presuntamente por Murillo en la que propone retornar al país, aceptando una extradición, si se concede arresto domiciliario a la exmandataria y extraditan a EEUU a Maximiliano Dávila.
“Lo mínimo que ahora puedo hacer es poner mi vida a disposición de la expresidenta Añez. Yo, en su día, le dije que saliera del país. No me hizo caso. Hizo caso a otra gente. Pero, ahora que veo que la están destrozando en un falso juicio, estoy dispuesto a sacrificarme por ella. Todo a cambio de que gane la expresidenta Añez y de que gane Bolivia”, sostiene parte de la presunta carta de Murillo.
Para el diputado de la bancada de Creemos, Erwin Bazán, la propuesta del excolaborador de Jeanine Áñez puso el dedo en la llaga porque si el exjefe antidroga, Dávila, es extraditado a EEUU podría proporcionar datos sobre vínculos de narcotráfico del expresidente Evo Morales.
“La parte que me parece sumamente interesante, que pone el dedo en la llaga, es el intercambio que propone con el señor Maximiliano Dávila, exdirector de la Felcn y hombre de confianza de Evo Morales. Nos parece interesante, nos parece que el Señor Murillo está poniendo el dedo en la llaga”, subrayó Bazán.
Recordó que la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) ofreció $us 5 millones por información que vincule con el narcotráfico a Dávila, no necesariamente por el exjefe antidroga, sino por Morales.
Por su parte, el diputado Froilán Mamani (MAS) calificó de chantaje la propuesta de Murillo y subrayó que por los hechos ocurridos durante la crisis del 2019, las investigaciones deben seguir su curso hasta dar justicia a las víctimas.