El expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, fue capturado este martes, después que un juez ordenó su aprehensión. Estados Unidos pidió su extradición por delitos de narcotráfico, uso y posesión de armas.

El exmandatario salió de su casa en la capital de Honduras, Tegucigalpa, fuertemente custodiado por la policía, con un chaleco antibalas.

Estados Unidos solicitó la extradición de Hernández a quien acusa de conspirar y exportar droga a Estados Unidos, además, de uso y posesión de armas de fuego.

La Corte Suprema de Justicia de Honduras designó este martes al juez que analizará la petición de EE.UU. de extradición.

La Cancillería de Honduras confirmó el lunes que había pedido a la Corte Suprema de ese país que aprobara la extradición “de un político hondureño” sin dar más detalles.

Hernández a fines del mes de enero entregó el poder a Xiomara Castro. Fue incluido en una Lista de Actores Corruptos y Antidemocráticos elaborada por Washington el año pasado que fue desclasificada la semana pasada.

Muy temprano este martes, Hernández mediante un audio publicado en su red social Twitter dijo que estaba presto y listo para colaborar y llegar voluntariamente a colaborar al juez natural que sea designado por la Corte Suprema de Justicia. “Para enfrentar esta situación y defenderse”.